lunes, 10 de marzo de 2014

CREER EN LA HABILIDAD DEL NIÑO

Estoy segura que muchas veces dejáis de hacer cosas por miedo a que vuestros niños se hagan daño. En la escuela no nos da miedo nada, por eso, si hacemos una salida la disfrutamos sin el miedo a que se puedan hacer daño, porque creemos en la habilidad de nuestros niños.  Si salimos al patio dejamos que experimenten cómo subir y bajar sin hacerse daño, unas veces lo consiguen, otras….no tanto, y hay algún lloro en el aprendizaje.


La mayoria de las veces estropeáis sin pretenderlo una acción bonita de conquista, trasmitiéndole vuestro miedo. Tenéis un sentido protector que no dejáis que pueda desarrollar sus capacidades motoras,  inculcando  miedo en su autonomía:

“ te vas a caer”
 “no subas más arriba”
 “vas a resbalar”
 “cógeme para que no caigas”
 “siempre tropiezas, baja de ahí”
 “te vas a hacer daño”


Con este sentido protector no damos al niño la libertad que necesita y quiere, más bien el niño teme por nosotros, por nuestro sufrimiento y tampoco disfruta, y cuando los papás no dicen nada…..¡ pagan con la cara!. 



El niño necesita arriesgar, tiene que  probarse a sí mismo, necesita:

  - sentir que supera un obstáculo que otro día no pudo 
  - se siente orgulloso de sí mismo 
  - saber de sus posibilidades 
  - superar miedos y tener la agradable sensación de  libertad, y hacerse valiente.

 

 Pero para eso habrá que dejar que arriesgue. Muchas veces es cierto que los niños corren riesgos innecesarios, pero lo necesitan,  y tenéis  que correr el riesgo muchas veces y sopesar un pequeño accidente antes de vuestra intervención…..¡¡¡¡bajaaaaa de ahíiiii!!!.


Hay que alertar  del  peligro, pero no anticiparos con gestos o actitudes. Cuando os déis cuenta de que algo tenéis que hacer o decir porque de no intervenir  os va a dar un ataque de algo pánico, podéis darle otro mensaje mucho más enriquecedor:

cógete fuerte, podrías caer”
“ahora al llegar arriba vuelve a cogerte igual para girar”
“sube con las dos manos”
“ves deslizándote despacio…”.




   Dice mi amiga Xell que los niños hasta los 5 años son más angeles que niños y que por eso siempre salen de las situaciones de peligro airosos...seguramente es cierto,  pero lo que sí que  es cierto, lo que sí es seguro, es que todos los niños tienen un angelito que les protege, ¡de eso doy fe cada dia en la escuela!.


No hay comentarios:

Publicar un comentario